domingo, 16 de agosto de 2015

Juan 1:18 en la nueva TNM en inglés de 2013.

La siguiente es una entrada en la cual analizo la decisión de elección de la lectura en griego koiné sobre la cual se basa la traducción del versículo Juan 1:18. Lo siguiente es válido para cualquier versión del Nuevo Testamento o Escrituras Griegas Cristianas en cualquier idioma, puesto que toda versión debe hacer una elección de qué lectura prefiere (usualmente proveniente de un texto maestro) para basar en ella la correspondiente traducción a un idioma vernáculo. 

Lo anterior significa que en esta entrada se habla de elección del texto original en griego Y NO DE TRADUCCIÓN.  A continuación paso a analizar que la traducción que se ha hecho en la TNM de Juan 1:18 es excelente, pero su elección del texto koiné sobre el que basa la traducción, en EL CASO ESPECÍFICO DE ESE VERSÍCULO talvez no es la más adecuada.  

La Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras revisión de 2013 en inglés decidió seguir separándose (al igual que en las ediciones anteriores) de Wescott y Hort en una partecita de Juan 1:18.  De hecho tampoco sigue a Nestle-Aland o el texto de UBS en ese versículo.

En ese texto Juan 1:18 dice en griego koiné lo siguiente según los TRES textos maestros que la Traducción del Nuevo Mundo ha venido usando:
“Θεὸν  οὐδεὶς  ἑώρακεν  πώποτε·  μονογενὴς  Θεὸς    ὢν  εἰς  τὸν  κόλπον  τοῦ  Πατρὸς,  ἐκεῖνος  ἐξηγήσατο”.  

Usted lo puede buscar por sí mismo si tiene la publicación “The Kingdom Interlinear Translation of the Greek Scriptures”, publicada por los testigos de Jehová, edición de 1985, o también puede buscar Juan 1:18 en Wescott y Hort, Nestle-Aland y The Greek New Testament de UBS. Si usted busca en The Kingdom Interlinear va a notar que en el texto en griego koiné no existe un "ὁ" antes de "μονογενὴς". En ningún texto maestro reconocido lo va a encontrar. Sí lo va a hallar en un manuscrito importante, el P75 (Muy importante por cierto). Lo que le estoy diciendo es que la TNM a pesar de reconocer que Wescott y Hort no coloca "ὁ" antes de "μονογενὴς", aun así traduce de un manuscrito que sí lo coloca.


Esa es la parte que nos interesa, “μονογενὴς  Θεὸς”, esto se puede transliterar “monoguenés theós”.  La TNM ha preferido traducir de manuscritos que tienen el griego “ὁ μονογενὴς  Θεὸς” (ho monoguenés theós). ¿Por qué? No sé. Pero sí reconocen que se apartan de los textos maestros en una nota en la revisión de 1987 en español (que se basa en la revisión en inglés de 1984). 

En la nota de 1987 en la TNM en español, en Juan 1:18 se explica así:
El dios unigénito”, P75אc;  P66א* B C*: “dios unigénito”;  ACcItVgSyc,h: “el Hijo unigénito”.

Así que allí en esa nota se nos dice que según el manuscrito P75  y el אc la lectura decía en griego “El dios unigénito (ho monoguenés theós)”, y según P66א* B C*, que son otros manuscritos, el texto dice “dios unigénito” (monoguenés theós)

Cualquiera puede tomar entonces la TNM de 1984 con referencias, ir a la página 6 y buscar qué significa P75, y א, luego averiguar en esa misma página que significa los símbolos c y*, entonces se notará algo interesante.

Encontraremos que lo que te dicen en esa nota de Juan 1:18 es básicamente que la única base sólida para pensar que la lectura original decía “El dios unigénito” (ho monoguenés theós) es P75  porque el símbolo c  que puedes ver arriba de א nos dice que la lectura original decía otra cosa, y que la lectura  ho monoguenés theós (El dios unigénito) proviene de alguien que se tomó la libertad de CORREGIR la lectura original. ¿Y qué decía la lectura original? Pues “monoguenés theós” como nos sigue diciendo la nota de la TNM en Juan 1:18 (אdice “dios unigénito”) Es simple. En realidad es muy simple. Recordemos que ya investigaste en la página 6 que “c” significa que es una corrección, y el símbolo * significa que es la lectura original. 

Por esa razón los TRES mejores textos maestros que existen (Wescott y Hort, Nestle-Aland y UBS) dicen  monoguenés theós en Juan 1:18, es decir “dios unigénito”. No dicen ho monoguenés theós, “el dios unigénito”.
En pocas palabras, Juan 1:18 debería decir, según los textos maestros actuales, “un dios unigénito” (Si revisas mis publicaciones anteriores de este blog quedarás más claro respecto al uso de “un” en ese versículo) en vez de “el dios unigénito”. Ninguna versión, que yo sepa, en ningún idioma moderno, traduce así el texto. (Véase los comentarios abajo de esta entrada dónde corrijo esto). Todas las versiones existentes no han tenido la capacidad de ver el “theós” sin artículo en ese versículo. Todas fallan en traducir “el dios”, “el Dios”, “Dios”, “el Hijo” en esa parte específica de Juan 1:18.  Les cuesta mucho ver que la Biblia se refiere a Jesús como “un dios”.  Y Juan lo hizo no solamente en Juan 1:1 sino probablemente también en Juan 1:18. Este es el meollo del asunto, para esto hice esta entrada, para que puedas visualizar que Juan puede ser que se refirió dos veces a "un dios" pensando en esa "palabra" o "logos" que menciona en Juan 1:1.  Luego lo hizo en Juan 1:18. Eso se llama ser consecuente y forma parte del contexto literario en el cual se presupone que el autor es consistente y no contradictorio en lo que escribe.

Lo que escribo arriba significa en palabras sencillas que Juan no dijo primero que la palabra era "un dios" en Juan 1:1 y luego en el versiculo 18 nos dice que era "el dios..."  ¿En qué quedamos? Pero lo importante no es la inconsistencia en sí, sino que el acuerdo general entre los eruditos es uno en el que se lee ninguna inconsistencia. Los dos versículos dicen "dios"; y no una lectura "el dios" en Juan 1:18 apoyada por solo un manuscrito de considerable antigüedad. 

Si deseas saber acerca de que hay una diferencia enorme entre "theós" y "ho theós" en griego koiné, entonces tendrás que leer mis entradas pasadas en este blog.

Te recomiendo revisar mis publicaciones anteriores para que puedas ver mi punto de vista respecto a la traducción “unigénito” y “un dios”. Pero hay que ser consecuente con la nota de la TNM que estoy considerando por eso en este post que estás leyendo escribo siempre “unigénito”

La TNM es definivamente la mejor traducción de la Biblia que existe, sin embargo, no es perfecta. En este pequeño asunto pienso que su elección de la lectura que se considera original talvez no es la más adecuada. Pero casi todo lo demás es perfecto (Aunque tengo que reconocer que el manuscrito p75 de donde basa la traducción es muy importante). Por ejemplo, es una de las pocas versiones en cualquier idioma que ha reconocido el uso de theós sin artículo en Juan 1:1 y que lo ha traducido correctamente "un dios".  Sin embargo, tal vez por recato prefirió basarse en el manuscrito P75, el cual analizo en una entrada pasada de este blog para su texto base de Juan 1:18, encima de todo, ya iba a causar una revolución en el mundo de la traducción al verter "un dios" en Juan 1:1 cuando salió la New World Translation of the Greek Scriptures en 1950. 

Con el paso del tiempo cada vez más eruditos le dan la razón al Comité de Traducción de la Biblia del Nuevo Mundo en su traducción de Juan 1:1. Cada vez que la leo, y eso es diario, me acerca a mi creador Jehová y a aquel quien lo ha explicado, un dios único, un dios unigénito, “la Palabra” de Dios (Juan 1:1), nuestro Señor Jesucristo.

viernes, 14 de agosto de 2015

El primer mal agradecido...¿Quién fue?



¿Has sufrido alguna vez debido a alguna persona mal agradecida?

Tal vez te sientas mejor si meditas un poco respecto a quién fue el primero que sufrió el mal agradecimiento. Ése fue Jehová Dios. Dios había creado un sinnúmero de ángeles en el cielo antes de hacer la Tierra (Job 38:4-7, Da 7:10).   Entre ellos estaba un querubín (Eze. 28:14) que no sabemos cómo se llamaba (Un querubín es un ángel de muy elevada posición). Pero sí sabemos el nombre de varias personas espirituales, como Miguel el arcángel que significa “¿Quién Es Como Dios?”, el ángel Gabriel que significa “Uno Físicamente Capacitado de Dios”, y el ángel que se apareció a Manóah (El padre de Sansón) que dijo que su nombre era maravilloso (No es que se llamara “Maravilloso” sino que su nombre lo era).

Todo eso hace pensar que el nombre de ese querubín hacía referencia a una cualidad sobresaliente que tenía dicho ángel o ese nombre daba alabanza y gloria a Dios. Sea como fuera, su mal comportamiento lo hizo indigno de ese nombre, y por eso la Biblia no nos lo dice. Me estoy refiriendo a ese querubín que más tarde se convirtió en Satanás el Diablo (El término satanás significa en hebreo “resistidor” y diablo significa “calumniador”). Ése fue el primer mal agradecido. ¿Por qué digo eso? Porque Jehová le dio la vida y una vida maravillosa al servicio de Dios y por otra razón que voy a analizar más adelante. En realidad llevaba una vida que disfrutaba. 

La Biblia a veces recurre a una técnica que usamos muy bien los nicaragüenses: Dile a Pedro para que entienda Juan.  En el libro bíblico de Ezequiel, capítulo 28, encontramos que Dios le manda a Ezequiel que le diga unas cuantas cosas al rey de la ciudad de Tiro. Todo está bien, pero entre las cosas que le tenía que decir hay algunas que, simplemente no encajan. El rey no pudo haber estado en el jardín de Edén. El rey imperfecto no pudo estar nunca “exento de falta”, y lo principal, el rey no era ningún “querubín”, un ángel (y no cualquier ángel es “querubín”) de Dios. 

Así que aquí en estos escritos se hace alusión al ángel que llegó a ser Satanás: Ezequiel 28:12-15: “Sellas un modelo, lleno de sabiduría y perfecto en hermosura. 13 En Edén, el jardín de Dios, resultaste estar. Toda piedra preciosa fue tu cobertura: rubí, topacio y jaspe; crisólito, ónice y jade; zafiro, turquesa y esmeralda; y de oro era la hechura de tus engastes y tus encajaduras en ti. El día en que fuiste creado fueron alistadas. 14 Tú eres el querubín ungido que cubre, y yo te he colocado a ti. En la montaña santa de Dios resultaste estar. En medio de piedras de fuego te paseabas. 15 Estuviste exento de falta en tus caminos desde el día en que fuiste creado hasta que se halló injusticia en ti.”

Analicemos esto un momento. Este querubín era muy sabio y hermoso. Para que nos imaginemos un poco la belleza de este ángel se nos dice que estaba cubierto de piedras preciosas, que tenía acceso directo a Dios estando en su organización santa (“en la montaña santa de Dios resultaste estar”), que se codeaba con ángeles fieles (“en medio de piedras de fuego te paseabas”) y que él mismo era fiel. 

Sigue diciendo la Biblia: (Ezequiel 28:17) “Tu corazón se hizo altivo debido a tu hermosura. Arruinaste tu sabiduría por causa de tu radiante esplendor. A la tierra ciertamente te lanzaré”. 

Ningún otro texto de la Biblia nos dice de forma tan clara por qué se rebeló el diablo. Su hermosura fue su perdición. Es evidente que eso lo llevó, como indican otros textos, a que pensara que él merecía la adoración que es derecho exclusivo de Jehová. 

Pero lo que realmente nos interesa es la expresión “querubín ungido que cubre, y yo te he colocado a ti” (Ezequiel 28: 14).  Esa expresión es muy interesante de analizar.

¿Ungido? ¿Qué significa ese término? Bien. Ezequiel es un libro escrito en hebreo. El término “ungido” en hebreo proviene de la raíz verbal hebrea ma·scháj, que significa “untar” y, por lo tanto, “ungir”. Así que el término “Ungido” en hebreo se puede transliterar “Mesías” (porque en hebreo es ma·schí·aj). El equivalente griego es Kjri·stós, o Cristo en español.

Jesús de Nazaret fue el “Ungido” o Cristo de Jehová porque fue el enviado para ser el salvador de la humanidad. Dios lo ungió con espíritu santo para esto. 

Los reyes hebreos eran ungidos con aceite. Todo el mundo entendía quién era el “Ungido de Jehová” en esos tiempos. Era el rey. También el término se usaba para el sumo sacerdote de Israel, quien había sido ungido con aceite. El término también tenía un uso más libre, algo así como ser simplemente “comisionado” por Dios para ejecutar una acción o tener un puesto, como el caso de Hazael, rey de Siria y Eliseo el profeta. También es el caso del rey Ciro, el persa quien fue comisionado por Jehová para que dejara ir a su pueblo del destierro en Babilonia (mencionado por nombre unos 200 años antes que naciera), un verdadero “ungido” de Jehová (Isaías 45:1). 

Esto hace pensar que el querubín edénico fue comisionado por Jehová para una misión, para hacer algo.  Ahora bien, el texto dice que “en Edén, el jardín de Dios, resultaste estar” y que “yo (Dios) te he colocado a ti”. Así que, probablemente, Dios lo colocó en Edén para cumplir una misión, ese “algo”. ¿Cuál habrá sido su misión? 

Tal vez la clave para comprender un poco de la misión del querubín edénico es la frase “querubín ungido que cubre” (Ezequiel 28:14). Esa frase es en hebreo  הַסּוֹכֵ֑ךְ, (has so w kek), literalmente “que cubre” o “el que cubre). 

¿Cómo han traducido la expresión “que cubre” algunas versiones de la Biblia? Veamos: 

La Biblia de las Américas
`Tú, querubín protector… 

La Nueva Biblia de los Hispanos
Tú, querubín protector
 
Reina Valera Gómez
Tú, querubín ungido, protector

Dios Habla Hoy (DHH)
Te dejé al cuidado de un ser alado

Nueva Biblia al Día (NBD)
Fuiste elegido *querubín protector

Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
Tú, querubín protector.

Estas versiones, y otras más han entendido que la expresión “que cubre” significa “protector”. Este entendimiento es razonable, aunque significa salirse de una traducción literal hacia una traducción dinámica, yo diría que casi cae en el campo de la paráfrasis. Pero lo cierto es que, en este caso, es muy razonable pensar que la expresión tiene que ver con protección, cuido. 

¿Había algo que cuidar en Edén? Bien, pensemos. ¿Qué había en Edén? Un paraíso con frutas y animales, ríos, vegetación, una pareja de seres humanos, un árbol del conocimiento del bien y del mal y un árbol de la vida.

¿Cómo el diablo ha logrado que se comporten algunos seres humanos en su relación con los siervos fieles de Dios? Pensemos en Caín, Esaú, Absalón, Ahitofel, Judas… ¿Qué tienen en común? 
 
Si Satanás ha causado que se actúe traidoramente...¿Por qué voy a pensar distinto de él?


Todos mataron o trataron de matar a quién debían proteger.  ¿Por qué voy a pensar distinto del maldito Satanás el Diablo? El incitó a rebelarse a la pareja humana acarreándoles el pecado y la muerte. Un verdadero asesino. Traicionó la confianza de Jehová.  No me es nada descabellado pensar que él estaba allí con alguna misión relacionada con la pareja humana o con uno de los dos árboles especiales. El asunto es que actuó como Judas, a quien Jesús lo comisionó para guardar la bolsa de dinero (a pesar que tenía un hombre de experiencia en el manejo de dinero, Mateo, quien había sido recaudador de impuestos) y pasó a traicionar primero la confianza que se había depositado en él, robando el dinero, y entregando al hijo de Dios. 

Satanás tenía un plan muy elaborado y Jehová impidió que pasara a más. Bastaba un solo ángel para impedir la entrada al paraíso después del pecado, pero Jehová apostó allí como dice Génesis 3:24 “los querubines y la hoja llameante de una espada que continuamente daba vueltas para guardar el camino al árbol de la vida.” 

¿Alguna vez hemos meditado en por qué razón Jehová puso más de un ángel a cuidar la entrada? ¿Por qué eran querubines y no simples ángeles? Por favor, la Biblia dice que un solo ángel es capaz de matar a 185,000 humanos en una noche (Isaías 37:36,37). ¿Acaso no podía impedir que 2 humanos entraran? Ah… es que había más de 2 humanos envueltos. Había un poderoso querubín queriendo entrar también: El maldito que se había convertido en Satanás, el Diablo. ¿Para qué quería entrar? El texto nos dice que los querubines y la espada fueron puestos “para guardar el camino al árbol de la vida”. 

Comprenden por qué este maldito no merece ser mencionado por nombre. Ese es el verdadero “aquel que no se le nombra”, simplemente porque no merecía su nombre original. Un mal agradecido que se “comió el mandado”. Que mordió la mano que lo alimentaba. 

Cada vez que se nos trate con mal agradecimiento, recordemos que ni fuimos los primeros, ni seremos los últimos. Jehová ha sufrido en carne propia el mal agradecimiento. Nosotros tenemos la oportunidad de agradecerle la vida y tantas provisiones que nos da a todos, la lluvia, el sol, el aire, las plantas, los animales, las bellezas naturales. ¿Qué no te alcanza el dinero para ir a San Juan del Sur? Jehová no tiene que ver con eso. El dio gratis todo. Nosotros los humanos lo hemos arruinado todo con nuestra avaricia. El 90% de la riqueza del mundo está en manos del 10% de los humanos, los ricos. 

Pero pronto Dios intervendrá los asuntos humanos y pondrá fin al mal agradecimiento, también dará muerte a la persona más mal agradecida del universo. Pronto tendremos la oportunidad de verlo.